Cirugía de Senos.
Mamoplastia y Mastopexia.
¿En que consisten estos procedimientos?
La mamoplastia y la mastopexia son procedimientos quirúrgicos que se utilizan para cambiar el tamaño, la forma y la altura de los senos, ya sea para fines estéticos o médicos.
La mamoplastia de aumento. Implica la colocación de implantes mamarios para aumentar el tamaño de los senos, la de reducción, donde puede eliminarse el exceso de tejido mamario para reducir el tamaño, la de reconstrucción, indicada después de una mastectomía para reconstruir la mama y finalmente el levantamiento de senos, (Mastopexia), logrando una apariencia más esbelta.
Mamoplastia de Aumento
En este procedimiento quirúrgico se utilizan implantes para satisfacer tu deseo de tener senos con mayor volumen, por ser demasiado pequeños para tu silueta, recuperar el volumen perdido al bajar de peso, o bien mamas que han quedado vacías o caídas tras los embarazos y la lactancia.
Lo más importante es elegir el tamaño de las prótesis, el tipo de implante, la proyección y el tipo de cirugía que se va a practicar, el objetivo es encontrar el máximo equilibrio entre tus deseos y un resultado natural acorde con el resto de tu cuerpo.
También se pueden usar implantes como cirugía plástica reconstructiva, tras una cirugía de mama para reconstruir un seno luego de una mastectomía o una lesión.
El tabaco no está aconsejado ni antes ni después de una cirugía de aumento, ya que la nicotina perjudica la curación y la cicatrización de las heridas. Por lo tanto, si eres fumadora, deberás dejarlo, como mínimo, 6 semanas antes y después de tu cirugía.
Levantamiento de senos. MASTOPEXIA
El agrandamiento de senos no corrige senos extremadamente caídos. Un levantamiento, también conocido como mastopexia, los eleva eliminando el exceso de piel y tensando el tejido circundante para remodelar y sostener el nuevo contorno. Usualmente puede realizarse un levantamiento junto con el agrandamiento.
¿Cómo es la preparación?
La preparación preoperatoria no es diferente de la prevista para cualquier otra cirugía por lo que recomendamos evitar los anticoagulantes como la aspirina y sustancias como el alcohol y el tabaco durante al menos 2 semanas antes de la fecha de la operación, para no estimular el riesgo de sangrado y para no comprometer la cicatrización de las incisiones.
En general, durante el período postoperatorio, se debe usar un sostén de sujeción durante aproximadamente un mes, pero la convalecencia no dura mucho tiempo, de hecho, la paciente puede reanudar el trabajo después de 1 semana y debe evitar los esfuerzos durante al menos un mes.